El riesgo de liquidez es una de las principales amenazas a la estabilidad financiera de cualquier institución.
Su impacto se puede ver en crisis económicas a gran escala, como la crisis financiera de 2008, donde la falta de liquidez llevó a la quiebra de bancos y empresas, desencadenando una recesión global.
Este artículo analiza a fondo el riesgo de liquidez, sus causas, cómo medirlo y las estrategias para gestionarlo.
También revisaremos el papel de las regulaciones internacionales y cómo las instituciones financieras han aprendido de los errores del pasado para mejorar su resistencia ante este tipo de riesgo.
¿Qué es el riesgo de liquidez? Definición clave y su importancia
El riesgo de liquidez se refiere a la incapacidad de una entidad para obtener fondos suficientes para cumplir con sus obligaciones financieras sin incurrir en pérdidas significativas.
En términos simples, una empresa o banco enfrenta un problema de liquidez cuando no tiene suficiente efectivo o activos líquidos para cubrir pagos inmediatos, como deudas, salarios o costos operativos.
Existen dos dimensiones del riesgo de liquidez:
Liquidez de financiación: Ocurre cuando una institución no puede obtener financiamiento en el mercado a tasas razonables.
Liquidez de mercado: Se da cuando los activos no pueden venderse rápidamente sin generar pérdidas significativas.
En el caso de los bancos, la liquidez es especialmente crítica porque dependen de depósitos de clientes, los cuales pueden ser retirados en cualquier momento.
Si demasiados clientes intentan retirar sus fondos al mismo tiempo, el banco puede colapsar. Este fenómeno se conoce como "pánico bancario", y ha ocurrido varias veces en la historia.
Riesgo de liquidez en el sistema financiero
El riesgo de liquidez afecta a toda la economía. Un banco sin liquidez no puede otorgar préstamos, lo que reduce la inversión y el consumo.
Cuando la liquidez desaparece del mercado financiero, las empresas tienen dificultades para operar y pagar sus deudas, lo que puede llevar a despidos masivos y recesión.
La crisis de 2008 fue un ejemplo claro: los bancos asumieron que siempre podrían vender activos o pedir préstamos si necesitaban efectivo.
Sin embargo, cuando estalló la crisis, el mercado de crédito se congeló y muchas instituciones financieras se encontraron sin acceso a liquidez.
Tipos de riesgo de liquidez: Estructural, de mercado y de financiación
El riesgo de liquidez se puede dividir en tres categorías:
Riesgo de liquidez estructural
Ocurre cuando una empresa o banco tiene activos ilíquidos pero pasivos exigibles a corto plazo. Esto genera un desajuste en el balance, poniendo en riesgo la estabilidad financiera.
Ejemplo: Un banco financia hipotecas de 30 años con depósitos a la vista. Si los depositantes deciden retirar su dinero en grandes cantidades, el banco podría enfrentar una crisis de liquidez.
Riesgo de liquidez de mercado
Se presenta cuando un activo no puede venderse rápidamente sin generar una pérdida significativa. Esto ocurre en mercados financieros con baja liquidez o en momentos de crisis.
Ejemplo: Durante la crisis de 2008, los bancos tenían grandes cantidades de activos respaldados por hipotecas, pero cuando intentaron venderlos, nadie los quería comprar, lo que provocó su desplome en valor.
Riesgo de financiación
Se produce cuando una empresa no puede obtener crédito para refinanciar su deuda. Puede deberse a problemas internos o a una crisis financiera generalizada.
Ejemplo: Lehman Brothers dependía en gran medida de financiamiento a corto plazo. Cuando los inversionistas perdieron confianza y se negaron a renovar su crédito, el banco colapsó.